Planes de previsión
Que hacer cuando un ser amado ha fallecido
Dejar la tramitologia a la persona que demuestre mayor entereza emocional.

Anotar o escribir todo (pendientes, teléfonos, nombres, direcciones, costos etc.)

En caso de que la persona acaecida cuente con un antecedente de padecimiento clínico que la haya llevado a la defunción comunicarse con el medico que tubo contacto con el paciente en los últimos tres meses para que así se expida el CERTIFICADO MÉDICO DE DEFUNCIÓN.

En caso de que el fallecimiento ocurra en algún hospital, clínica privada o sanatorio los médicos de guardia tendrán la obligación de proporcionarles el ya citado documento.

En caso de que la defunción ocurra en la vía publica, hubiera sido causada por un accidente o se desconozcan a ciencia cierta las causas de esta, el ministerio publico procederá a trasladar el cuerpo de la persona fallecida hacia el servicio médico forense en el cual se le llevará a cabo la autopsia de ley para determinar la causa exacta de la muerte, (en este tipo de casos se tendrá que levantar un acta ante el ministerio publico para que de esta manera se libere el cuerpo y el certificado médico de defunción.)

El certificado médico de defunción es la constancia expedida en los términos que establezcan las autoridades sanitarias para la comprobación o información de determinados hechos entre los cuales se encuentran los certificados de muerte fetal y certificado médico de defunción. y es el principal documento que deberá expedirse para iniciar la tramitologia así como los traslados de la persona fallecida.

Tener a la mano documentos tales como acta de nacimiento, acta de matrimonio y acta de defunción del conyugue encaso de que la persona fallecida fuese viuda, así como títulos de propiedad y /o contratos de los lugares en donde se fuese a inhumar (sepultar) a la persona acaecida o depositar las cenizas.

Contar con identificaciones oficiales en todo momento o copias de las mismas.

Contar con teléfonos de los proveedores de servicios funerarios (funerarias o capillas) presupuestar y tomar las decisiones en familia sin apresurarnos es importante para que ese momento se convierta en un momento llevadero y de tranquilidad, verificando que la empresa a la que usted se acerca es seria y que proveerá de todas las necesidades y particularidades que usted y su familia requieran.

Es importante encomendar tareas a personas en particular (no generalizarlas) tales como ir preparando la vestimenta que usara la persona fallecida (cambio completo de ropa) y efectos personales que deseen que su familiar use en el momento de la velación (pelucas, dentaduras, perfumes, cosméticos, medallas, rosarios etc.…
El duelo
El duelo tiene lugar tras cualquier clase de pérdida, aunque suele ser más intenso tras el fallecimiento de algún ser querido. No es un sentimiento único, sino más bien una completa sucesión de sentimientos que precisan de cierto tiempo para ser superados, no siendo posible el acortar este período de tiempo.

El duelo es más frecuente tras el fallecimiento de alguien al que conocíamos desde hace algún tiempo.

Este entumecimiento o adormecimiento emocional puede ser de ayuda a la hora de afrontar los importantes cometidos que hay que llevar a cabo tras el fallecimiento, tales como el contactar con los demás parientes y la organización del funeral. Sin embargo, esta sensación de irrealidad puede llegar a ser un problema si persiste durante mucho tiempo. El ver el cuerpo del fallecido puede ser, para algunos, la forma de empezar a superar esta fase. De forma similar, para algunas personas, el funeral es una ocasión en la que se empieza a afrontar la realidad de lo acontecido.

Otro sentimiento común en el proceso del duelo suele ser el de culpa. Las personas en duelo con frecuencia piensan en todas aquellas cosas que les hubiera gustado decir y/o hacer y que no fueron posibles. Pueden incluso llegar a pensar que podrían haber actuado de una forma diferente y que esto hubiera podido evitar la muerte de su ser querido. Desde luego, la muerte generalmente está más allá del control de cualquiera y la persona en duelo puede necesitar que se lo recuerden.

La culpa puede también surgir si se experimenta cierta sensación de alivio tras el fallecimiento de una persona afectada por una enfermedad particularmente penosa o muy dolorosa. Este sentimiento es natural, extremadamente comprensible y muy frecuente.

Con el paso del tiempo, el dolor intenso de la fase inicial del duelo comienza a desvanecerse. La depresión disminuye y empieza a ser posible pensar en otras cosas e incluso el mirar hacia el futuro.

La fase final del proceso de duelo es la desvinculación de la persona fallecida y el comienzo de un nuevo tipo de vida. La depresión desaparece por completo, el sueño mejora y el nivel de energía retorna a la normalidad.
 
Que Hacer
El Duelo